La ministra del Ambiente, Elsa Galarza, dijo a su vez que el retiro de Estados Unidos del Acuerdo de París que fija metas de reducción de emisiones de efecto invernadero ‘no alegra a nadie, pero tampoco cambiará la situación’, pues todos los países están convencidos de la necesidad de tomar medidas ambientales.
Más duro fue el exministro de esa cartera Manuel Pulgar Vidal, quien presidió la vigésima Conferencia de las Partes de Naciones Unidas sobre el Clima (COP20) de 2014, que preparó aquí los contenidos del Acuerdo del París firmado al año siguiente en la COP21 de la capital francesa.
El experto ambientalista afirmó que ‘el presidente Trump ha tomado una decisión irresponsable, no solo con el planeta por las evidencias claras de lo que significa el cambio climático, sino con sus propios ciudadanos’.
‘Retirarse del Acuerdo de París significa declinar la obligación que tiene un mandatario para cuidar la salud de las personas, la integridad de los ecosistemas y la mejora ambiental’, agregó, al anotar que solo 25 por ciento de los electores de Trump están de acuerdo con la medida.
‘La juventud de hoy, conectada y siempre preocupada de lo que pasa, no va a tolerar une medida como esta’, expresó ayer Kuczynski, al recordar que en Perú el cambio climático ‘nos derrite los glaciares, nos calienta las corrientes marinas’ y genera desastres.
En meses pasados, torrenciales lluvias causadas por un calentamiento del océano Pacífico próximo a las costas peruanas dejaron un saldo de 145 muertos y daños por al menos seis mil 800 millones de dólares.
Perú es el tercer país más vulnerable a los cambios climátios, tras Bangladesh y Honduras, según alertó hace ya dos años el Instituto Tyndall Centre.
El incremento de la temperatura del planeta esta derritiendo los glaciares de Bolivia y Perú, que constituyen 77 por ciento de los de todo el mundo, lo que hará imposible la supervivencia en poblaciones en los altos andinos que se abastecen del agua de esos glaciares y que generan corrientes para el riego, el agua potable y la energía eléctrica en las ciudades.
Además, el río Amazonas, el más caudaloso y largo de la Tierra, que comparten Perú, Brasil y Colombia, está en riesgo por el peligro de que el calentamiento eleve su temperatura en seis grados Celsius hasta final de siglo, reduzca la lluvia en un 45% y cause deforestación, afectando catastróficamente todo el ciclo hidrológico mundial.
Según un estudio del gobierno peruano y organismos internacionales, en los próximos años la pesca, la ganadería en los alto andinos y la agricultura serían las actividades más afectadas por el cambio climático en Perú en los próximos años,.
El informe ‘La economía del cambio climático en el Perú’, presentado por Perú en la COP20, señala que, además, la hidroenergía, la minería, el turismo, la salud y la infraestructura también podrían sufrir impactos adversos por el calentamiento global.
Ese estudio señala que la alta vulnerabilidad peruana ante los trastornos del clima se debe a que tiene zonas costeras bajas, así como áridas y semiáridas y un territorio susceptible a la deforestación o erosión, a los desastres naturales, a la sequía y la desertificación, así como áreas urbanas altamente contaminadas y ecosistemas frágiles.